Universitat de Barcelona. Departament d'Història de la Filosofia, Estètica i Filosofia de la Cultura
Este trabajo que presento como tesis doctoral para la obtención del grado de doctor en filosofía trata de la comprensión de la arquitectura desde el punto de vista fenomenológico-hermenéutico. La mejor manera de justificar la elección del tema, la arquitectura, y el modo de aproximación a él, la fenomenología y la hermenéutica, es vincularla a mis estudios. Mi formación como arquitecto hace que la elección del tema no sea sólo un objeto de interés teórico, un objeto de conocimiento e investigación, sino que es algo más, algo de lo cual tengo experiencia directa y es, pues, una parte de lo que soy. Iba a decir “mi profesión” pero no sería del todo cierto porque he proyectado y diseñado sólo de manera marginal (un par de concursos y algún proyecto doméstico); ya desde los últimos años de la carrera de arquitectura decidí dedicarme a la teoría y esa decisión me llevó a realizar los estudios de filosofía, donde la fenomenología y la hermenéutica atrajeron mi interés y con las que aprendí a pensar y a comprender la arquitectura. He dividido este trabajo de investigación en cinco partes. En la primera (Arquitectura moderna y crisis de la cultura) examino la arquitectura moderna en el contexto de lo que Husserl llamó la crisis de la cultura europea. La arquitectura sufrió las consecuencias de esta crisis bajo la forma de una creciente identificación de la arquitectura con la tecnología o la ingeniería, por un lado, y una reducción de su aspecto artístico a la mera decoración estética añadida a la estructura tecnológica, por el otro. Ambos aspectos, la tecnología y la comprensión estética del arte dieron forma a la arquitectura progresivamente desde el Renacimiento, se consolidó con el Movimiento Moderno a principios de siglo XX, y sigue en la arquitectura contemporánea. Llamo la atención sobre el riesgo de que la arquitectura acabe identificándose con la ingeniería y la importancia que tiene el arte para compensarlo, siempre y cuando éste no se entienda como estética, sino que se comprenda como un fenómeno hermenéutico. En la segunda parte (Hermenéutica de la arquitectura), siguiendo a Gadamer, expongo la comprensión hermenéutica del arte según la cual la experiencia de la obra de arte no se resuelve en la simple observación estética desinteresada, sino que despierta una experiencia interpretativa a través de la cual podemos ganar una comprensión del mundo. La hermenéutica cuestiona críticamente la autonomía del arte, pero sin negarla. La concepción del arte como interpretación del mundo tiene en la arquitectura un caso ejemplar pues ésta, por su propia naturaleza, no puede ser autónoma, tiene una exigencia y compromiso con el mundo. Desde este punto de vista propongo entender la arquitectura como representación y, siguiendo a Heidegger, como representación (mimesis) del mundo y de la verdad. En la tercera parte (El origen de la arquitectura y el mundo histórico) trato un tema crucial de la fenomenología, la cuestión del origen. También es un tema recurrente a lo largo de la historia de la arquitectura, especialmente en tiempos de crisis y de necesidad de renovación arquitectónica, cuando hay que replantearse cuál es el sentido y la manera en que se debe construir, si hay algún ideal (y de qué tipo de idealidad se trata) de edificio y de modo de habitar. Entonces se medita sobre el primer edificio, la primera forma de habitar en el mundo. Encontramos en el origen algunos elementos esenciales a la arquitectura de todos los tiempos y lo ilustramos con el templo griego y la catedral gótica. En la cuarta parte (Arquitectura y habitar) recupero la situación moderna de la arquitectura bajo el punto de vista del desafío que la tecnología ha puesto al ser humano para habitar en el mundo, el problema de la inhospitalidad o desarraigo (Unheimlichkeit, Heimatlosigkeit) característico del hombre moderno. Seguiré los análisis de Heidegger sobre el habitar y la esencia de la tecnología y el reto que pone a la arquitectura si debe garantizar las condiciones de habitar. Expondré una posible interpretación de Heidegger sobre el significado del habitar auténtico y cómo la arquitectura lo representa. La quinta parte (Arquitectura y espacio) trata las características del espacio geométrico en su diferencia, y a la vez dependencia, de la experiencia vivida del espacio que lo estructura en lugares y regiones en cuyo centro el cuerpo le da sentido. Veremos también cómo se constituyó históricamente el espacio geométrico cuando se descubrió en el Renacimiento la perspectiva y su enorme influencia en la arquitectura que preparó el camino de su creciente racionalización. La nueva representación del espacio en el cubismo, más situacional que perspectivo, nos ofrece interesantes posibilidades del uso del fragmento para superar la homogeneización y abstracción del espacio de la arquitectura contemporánea.
Arquitectura; Architecture; Crítica d'art; Crítica artística; Art criticism; Espai (Arquitectura); Espacio (Arquitectura); Space (Architecture); Filosofia de l'art; Filosofía del arte; Philosophy of the art
72 - Architecture
Ciències Humanes i Socials