Universitat Autònoma de Barcelona. Departament de Dret Públic i de Ciències Historicojurídiques
El objetivo principal de esta tesis es el análisis de la construcción discursiva tanto de la UE como de Rusia en torno a cuatro roles de la política exterior de la UE. En términos empíricos, el principal tema de este estudio es: ¿Cómo puede la interacción de las percepciones de una y otra, la UE y Rusia, contribuir a la explicación de las tensas relaciones UE-Rusia a nivel ideacional? y ¿de qué forma dicha dinámica contribuyó al clímax del conflicto reflejado en los acontecimientos de Ucrania? Con el objetivo de responder a esta cuestión esta tesis analiza cómo la Unión Europea se construye a sí misma en tanto que actor de política exterior, cómo estas auto-representaciones reverberan en el contra-discurso ruso y qué repercusiones tienen estas imágenes reflejadas en las interacciones entre ambos actores a nivel ideacional y en sus acciones de política exterior. Los procedimientos empíricos están basados en el marco analítico y teórico que está estrechamente relacionado con los supuestos básicos de la agenda de investigación constructivista y postestructuralista: es decir, la fuerza constitutiva de las declaraciones políticas y la percepción de que la identidad es el resultado de la interacción entre el Yo y el Otro. El marco analítico adopta el significado amplio de la identidad como “un sentimiento de individualidad” que se basa en los siguientes criterios: autonomía, unidad, capacidad y representaciones ideacionales sujetas al juicio externo. La parte empírica de la tesis ha revelado que el contra-discurso ruso exhibe una amplia gama de reacciones discursivas que van más allá de la dicotomía convencional reconocimiento/no-reconocimiento. Así, Rusia ha manifestado una tendencia visible a desafiar y cuestionar las imágenes de auto-adulación de la UE basadas en su carácter de actor con una identidad distintiva. Este patrón de no-reconocimiento que prevalece en la narrativa política rusa ha creado preferencias conflictivas, intensificadas por la resistencia recíproca de la UE a estas imágenes reflejadas, las cuales a su vez ponen en duda el status de Rusia como un “Otro significativo” y “socio estratégico”. Por consiguiente, en su “lucha por el reconocimiento de status” ambos actores se encuentran presos en el círculo vicioso y autorreforzante del no-reconocimiento recíproco. La dificultad para evitar este hecho nace de su conceptualización en términos de jerarquía y securitización derivando en medidas extraordinarias como la participación de Rusia en la crisis en Ucrania.
The principle object of this thesis is the analysis of the EU and Russian discursive construction of four EU foreign policy roles. The main empirical question of the study is: How can the interplay of the EU-Russian perceptions contribute to the explanation of the strained EU-Russian relations at the ideational level and how did these dynamics contribute to the climax of the conflict as presented by the Ukrainian events? In order to answer this question this thesis proceeds with the analysis of how the European Union constructs itself as a foreign policy actor, how these self-representations reverberate in the Russian counter-discourse and what repercussions these mirror images have on the interactions between both actors at the ideational level and foreign policy outcomes. These empirical steps are based on the analytical and theoretical framework which is closely linked with the core assumptions of the constructivist and poststructuralist research agenda, namely the constitutive force of political utterances and the view that identity is the result of the interaction between Self and Other. The analytical framework accepts the all-embracing understanding of identity as ‘a feeling of Selfhood’ that consists of the following criteria: autonomy, unity, capability and ideational representations that are subject to external judgment. The empirical part of the thesis revealed that Russian counter-discourse exhibited a wide gamut of discursive reactions that go beyond the conventional recognition/misrecognition dichotomy. However, Russia manifested a conspicuous tendency towards challenging and contesting the EU’s self-ingratiating images as an established actor characterized by distinctive identity. These misrecognition patterns prevalent in Russian political narrative created conflictual predilections intensified by the EU’s reciprocal resistance to these mirror images, which in turn cast into doubt Russia’s status as a ‘Significant Other’ and ‘strategic partner’. Therefore, in their ‘struggle for recognition of the status’ both actors found themselves caught in the vicious and self-reinforcing cycle of mutual mis- and non-recognition. The difficulty to avoid it originates from its framing in the terms of hierarchy and securitization leading to extraordinary measures like the Russian involvement in crisis in Ukraine.
La Unió Eurpea; La Unión Europea; The European Union; Rússia; Rusia; Russia; Identitat; Identidad; Identity
32 - Política
Ciències Socials