The governance of vertical relationships

Abstract

Mi tesis utiliza la noción de contrato relacional para explicar pautas aparentemente contraintuitivas de organización vertical. El primer capitulo muestra que, cuando existen externalidades entre empresas, la integración vertical reduce la tentación de sus ejecutivos de bajar el esfuerzo, haciendo sus promisas de cooperar más creibles. El segundo capitulo muestra que, cuando una regulación europea prohibió los territorios exclusivos en la distribución de automóviles, los fabricantes impusieron estándares de servicio y precios maximos, estos últimos para reducir la tentación de los concesionarios de romper pactos informales para no competir. El tercer capitulo muestra que, pese a la asignación simétrica de derechos de decisión en sus contratos de franquicia, los fabricantes de coches dictan estándares a los concesionarios, remunerandolos con descuentos discrecionales. Eso sugiere que los fabricantes son delegados informalmente para tomar decisiones, y usan sus podéres contractuales como recurso extremo contra la tentación de los concesionarios de rechazarlas.

My thesis applies the notion of relational contracts to explain seemingly counterintuitive vertical arrangements. The first chapter shows that, in the presence of spillovers between an upstream and a downstream firm, vertical integration reduces the downstream manager's present gains from shirking, making her promise to cooperate with the upstream firm credible. The second chapter shows that, after a European regulation prohibited exclusive territories, car dealership contracts switched to a mix of service standards and price ceilings, and argues that price ceilings were introduced to reduce the dealers' short-run profits from reneging on an informal "no-compete" agreement. The third chapter shows that, despite the even allocation of decision rights in dealership contracts, car manufacturers dictate performance standards ex post, and reward dealers through discretionary discounts. This suggests manufacturers are informally delegated to set standards, and use formal decision rights as a last resort against the dealers' temptation to overturn their decisions.